Brave

Hace uno meses, el otro creador de este espacio cultural (o sea, Facundo Franco) declaró en la radio indonesia Gajahmada 102.4 que su aspiración es tener un redactor por día, para así poder encargarse netamente de las tareas administrativas y de edición. Ya empezamos con el riguroso casting.

Hoy vamos a dar otra muestra de la importancia que les damos a ustedes, nuestros seguidores. Pretendemos que El Guionista sea un espacio lo más 2.0 posible, bajo ciertos parámetros. En el día de la fecha, hará su debut en nuestro blog como columnista freelance (teniendo una propuesta seria para volverse fijo) nuestro visitante y comentarista más asiduo: les presento a Marxelo SanPol, un experto y apasionado de los musicales y de las películas animadas.

- Una de las muchas razones por las que cada 31 de diciembre me propongo vivir un año más, se hace evidente al promediar el primer semestre con el estreno de una nueva producción del estudio de la lámpara saltarina. Hablar de Pixar no es hablar de películas animadas sino de cine de animación; cine del bueno, de ese que sorprende con cada nueva entrega; de ese que siempre genera expectativas y que, ciertamente, sabe cómo complacer al espectador más exigente.

Lo hicieron a fines de los ‘90 con Toy Story, el primer largometraje generado íntegramente dentro de una computadora. El resto es historia: con Bichos (A Bug’s Life) nos dieron un ángulo de visión al que no estábamos acostumbrados. Con Monsters Inc. descubrieron la fórmula para llegar al alma con una dosis exacta de humor y emoción. Con Buscando a Nemo (Finding Nemo) nos mostraron que era posible dibujar el agua. Con WALL·E dieron color y textura al aire de un planeta devastado creando una obra de arte de dimensiones épicas.

Pero Pixar es mucho más que desafíos tecnológicos y animación de alta gama. Pixar es, ante todo, la garantía de una buena historia contada como nadie más sabe hacerlo. Y es con esta carga que Valiente (Brave) arremete en la gran pantalla para narrar por primera vez en la historia del estudio, una fábula medieval desde la óptica de una princesa alejada de sus célebres y edulcoradas colegas inmortalizadas por la factoría del viejo Walt.

Mérida es, en cambio, una mujer en contra de su destino impuesto, decidida, capaz de encontrar una fortaleza que la excede desde el centro mismo de la acción, ya sea internándose en un bosque oscuro siguiendo el rastro de una misteriosa hechicera o luchando por salvar su vida y la de su pueblo de las fauces de un oso tan aterrador que sobresalta a más de un espectador entrado en años.

La elección de una visión femenina para narrar la historia de una princesa adolescente dio por tierra con los temores iniciales y logró el objetivo más buscado: no espantar al gran porcentaje de la platea masculina que cada año engrosa las arcas pixarianas.

Valiente es la historia de una mujer; pero no es una historia rosada. Es oscura y tiene la profundidad de todo aquello que nos hace más fuertes al momento de ir en busca de nuestra propia identidad. No es posible ser quien no somos; y Mérida lo sabe. No hay cómo superar los miedos sin enfrentarlos con determinación, coraje y mucha fe; y Mérida también lo sabe. Su historia está basada en una antigua leyenda que ya pudimos vislumbrar en Tierra de Osos (Brother Bear). Pero, al igual que toda historia de amor es una versión de Romeo y Julieta, Valiente sabe cómo borrar esa sensación de “ya haberlo visto”; sobre todo cuando lo visual se impone como nunca antes.

En 2010, el estreno de Enredados (Tangled) me dejó pensando en cuál sería el próximo paso y cómo sería posible superar lo que ya parecía imposible de mejorar. La respuesta es Brave. Y mi nuevo interrogante es, quizás, más filosófico y tiene que ver con los delgados límites de la realidad que ya parece imperfecta frente a la creación de un nuevo universo creado por el talento y la sensibilidad de artistas extraordinarios. -

Ficha Técnica

Directores: Mark Andrews, Brenda Chapman, Steve Purcell.

Año: 2012.

Duración: 100 minutos.

Calificación El Guionista: 9.

Películas por catálogo: no todavía.

Tráiler para Cine