Zero Dark Thirty

-¿Zero Dark qué? –Zero Dark Thirty. -… -La de Bin Laden. -Aaaaaah…- Probablemente esta conversación se haya producido en más de una sala de cine entre dos personas que están decidiendo si ven la nueva de Darín, la de Tarantino, la nueva de Disney o esta propuesta de tinte más polémico y político que la ganadora del Oscar, Kathryn Bigelow, nos propone esta temporada para que nos adentremos un poco más en la frenética búsqueda hecha por los servicios de inteligencia estadounidenses del terrorista más famoso de todos los tiempos. A continuación, análisis pormenorizado de este film que incluye las respuestas a preguntas como ¿puede esta película ganar el Oscar?, ¿conoceremos la verdad sobre la captura de Bin Laden adentro de una sala de cine? y ¿será cierto que este grupo de agentes uniformados detuvo y asesinó al verdadero Osama?

Primero lo primero. Zero Dark Thirty es un largometraje de un par de horas que cuenta todo lo hecho por una perseverante y despiadada mujer (a la que solo conocemos por el nombre de Maya) desde el 11 de Septiembre de 2001 (atentado a las Torres Gemelas) hasta la noche en que, diez años después, un grupo comando a bordo de dos helicópteros del ejército aterrizara en medio de una modesta casa ubicada en una anónima ciudad pakistaní para, minutos más tarde, ponerle fin a la vida del hombre más buscado de la historia moderna.

Si partimos de la base de que, como se encarga de anunciar el film al comenzar, todo lo filmado se basa en testimonios de protagonistas y testigos de los hechos, debo decir que la película está muy bien. Arranca con un muy buen recurso a pantalla negra con testimonios en off de víctimas del atentado a las Torres que pudieron llamar a sus familiares y seres queridos luego del impacto del primer avión, antes de que los edificios se derrumbaran. Y una vez establecido el contexto, hay un largo desarrollo sobre la investigación y la logística que llevaron al desenlace que todos conocemos y que incluye torturas a líderes terroristas por parte de agentes estadounidenses, trabajo de campo por todo Pakistán, nuevos atentados que entorpecen o facilitan la investigación y demás elementos técnico tácticos.

Queda claro que la escena final, clímax incluido, consiste en la captura de Osama propiamente dicha, de la que no daré detalles de acuerdo a lo establecido por el manifiesto del crítico de cine denominado “Spoiler Alert”. Lo que sí puedo decir es que, al margen de lo relevante y bien contado que está todo el temita de la investigación y asesinato de Bin Laden, es muy interesante la historia de la protagonista y su arduo trabajo que, con el paso de los años, se va transformando en una obsesión hasta tomar la forma de una manía que, como no podía ser de otra forma, terminará decantando en una sensación de profundo vacío cuando el trabajo de toda una década se termina y la pregunta ¿y ahora qué? se hace ineludible. Para esto, claro está, fue fundamental la gran labor de Jessica Chastain que, desde su aparición ante el gran público en The Help, no para de ofrecer enormes interpretaciones que, tarde o temprano, la harán (si es que ya no lo es) merecedora del tan codiciado premio de la Academia.

En conclusión, cada vez me convenzo más de que nosotros, la gente común, no podemos saber a ciencia cierta si el gobierno yankee atrapó y mató a Bin Laden. Algunos sostienen que sí, otros aseguran que no era él sino otro líder terrorista quien fuera capturado por la inteligencia estadounidense, mientras que muchos adherimos a la teoría que afirma que sí lo capturaron pero que, lejos de matarlo, lo tienen encerrado en un búnker archirrequetecontra secreto del FBI donde también guardan la escenografía que usaron cuando “el hombre llegó a la Luna”, el Santo Grial, la espada Excalibur y el borrador de la Constitución con la palabra imbéciles. Sea como sea, lo cierto es que a raíz de esto se hizo una buena película que, sin ser de la talla de aquellas premiadas como “Mejor Película”, resulta muy interesante y merecedora de pagar los miles de pesos que hoy por hoy cuesta una entrada de cine.

Ficha Técnica

Reparto: Jessica Chastain - Kyle Chandler - Jason Clarke.

Director: Kathryn Bigelow.

Año: 2012.

Duración: 157 minutos.

Calificación El Guionista: 7.

Películas por catálogo: momento que soy lento.

Tráiler para Cine